En los tiempos que corren es muy
difícil tener la posibilidad de tener cerca de casa un festival de rock
gratuito. Sin embargo, Vitoria siempre está ahí para abrazar de cerca la
música. Si el Azkena Rock Festival sigue siendo uno de los pocos festivales
nacionales que sigue sobreviviendo en esta última época, el Siberia
Rock Festival quiere que la ciudad siga siendo sinónimo de buena música
y buen rollo.
Esta segunda edición de este magnífico
festival que se celebra en los jardines de Falerina, tenía el atractivo de
contar, además, con dos de las bandas nacionales actuales que más me gustan, los gaditanos
Bourbon y los vitorianos The Soulbreaker Company. La cita era
ineludible.
BOURBON
Tras disfrutar de un divertido
concierto de los locales Moonshine Wagon,
que hicieron bailar a todo el personal con su propuesta basada en el folk, la
banda de Sanlúcar de Barrameda hacía
acto de presencia en el escenario vitoriano.
Como viene siendo habitual en las últimas
fechas, y que al parecer se va a mantener así, la banda ha pasado de ser un
cuarteto a un trío, perdiendo un segundo guitarra por el camino, pero logrando
mantener la misma fuerza de siempre.
A ritmo de Fango, canción introductoria que da título a su único disco hasta
la fecha, comenzaba el concierto. Los últimos acordes del tema se fundieron, a
diferencia del disco, con los primeros de Por si vuelves, donde ya pudimos
comprobar que la pérdida de un cuarto miembro no les ha afectado en absoluto. La
base rítmica formada por Álvaro
(batería) y Juanma “el noruego”
(bajo) sigue tan potente como siempre, y el frontman Raúl “el negro” (guitarra y voz) campa a sus anchas dando un
recital con su Gibson SG y disfrutando sobre el escenario casi tanto como los
seguidores que asistimos al bolo.
Ahora sí, le tocaba el turno a La charca del Diablo, sin duda uno de
sus mejores temas, que fue continuado por El
Día de la Redención y Algo me Dice
que No, canciones todas ellas que cantamos como si de una banda clásica se
tratase, y es que el disco desborda calidad, clase y sabor añejo por todos los
lados. Otro de sus grandes temas, El Rey,
dio paso a El Inquilino y Solo, donde Raúl se dejó llevar y tuvo algún que otro descuido con el
micrófono, no pudiéndose oír varias estrofas del tema.
Así nos obsequiaron con un sentido
nuevo tema que alargaron para fundirlo con un extracto de Jane´s Addiction. La fiesta era increíble. Pero si aquello nos
estaba maravillando, la versión del Iron
Man de Black Sabbath hizo que
las primeras filas explotasen y se volviesen literalmente locas. A destacar el
buen hacer de Juanma emulando al mismísimo
Geezer Butler.
La anterior vez que les había podido
ver, se habían decidido por hacer dos versiones de una de sus bandas
predilectas: Thin Lizzy. Sin
embargo, el carecer en estos momentos de un segundo guitarra complica mucho esa
tarea, pero como querían despedirse por lo alto, optaron por Cactus y su grandioso Evil. De esta manera, daba por finalizado
un concierto magistral y lleno de fuerza. Ya solo queda que graben un segundo álbum
a la altura del primero y se consoliden como una de las mejores bandas del país.
¡¡¡Larga vida a Bourbon!!!
THE SOULBREAKER COMPANY
Un pequeño descanso para estirar las
piernas y retomar fuerzas, y llegaba, por fin, el plato fuerte del fin de semana. La quinta vez que iba a tener delante de mis ojos a la banda vitoriana, y he de
decir que cada vez salgo más satisfecho de un concierto suyo. Esta vez no fue
una excepción.
Del mismo modo que inicia su último
disco de estudio, “Graceless”, daba
comienzo el concierto. Una preciosa Many
so Strange, que ya se ha hecho hueco entre los grandes temas del grupo. Pero
si un tema sobresale sobre todos ellos, ese es el Oh! Warsaw que vino a continuación, donde el vocalista Jony Moreno pudo dar rienda suelta a su
poderío vocal y realizar unos agudos difíciles de alcanzar para la mayoría de
los cantantes. Una lástima, eso sí, que en directo la banda no cuente con el
saxo que protagoniza la parte central del tema.
1789 sería la encargada de volver a
representar su último trabajo antes de que la fantástica y pegadiza Colours of the Fire hiciera lo propio
con su gran obra maestra, “Itaca”.
Otro nuevo tema, Dust from the Stars,
dio paso a Kiss in your Face, canción
de su segundo disco “The Pink Alchemist”,
del cual retomaron varios temas para este show, a diferencia de lo que venía
siendo habitual en las últimas fechas.
Pero está claro que la banda quería
centrarse en presentar los nuevos temas enlazando de manera consecutiva la
magnífica How will we get by?, la
sentida Rain or Shine y la divertida
y animada You! Este hecho no me
satisfizo del todo porque dejaba de lado temas imprescindibles de su trabajo
anterior, pero es cierto que la ejecución de los temas fue sobresaliente con Óscar Gil destacando a los teclados y
creando bonitas atmósferas alrededor de las dos fantásticas guitarras de Asier Fernández y Daniel Triñanes.
Si ya tenían al público, muy variado
tanto en sexo como en edad, metido en el bolsillo, decidieron darles una grata
sorpresa con la salida al escenario de Txus,
el vocalista de otra de las grandes agrupaciones vitorianas, Arenna. La canción elegida para que
ambos cantantes compartieran funciones vocales no fue otra que el majestuoso Words del legendario Neil Young. La ovación al término del
tema fue ensordecedora.
El ritmo descompasado y característico
de Blood that you Wish, con un sonido
más pesado y contundente, y con el batería Andoni Ortiz dando muestras de su buen hacer, daba
paso a otro de sus grandes clásicos, el cautivador It’s Dirt, que interpretaron de manera más rápida y contundente en
su comienzo para después atrapar al público con esa atmósfera que solo ellos
son capaces de lograr.
La banda se despedía entre aplausos,
pero volvía a escena para interpretar la maravillosa The Wheel is Turning, con Jony
a la guitarra acústica y con toda la banda dejando hasta la última gota de
sudor que les quedaba en el cuerpo. Un final maravilloso para un concierto con
un setlist un poco diferente al que nos tenían acostumbrado, pero con la misma
grandeza y profesionalidad de siempre. Desde luego, cada día tengo más claro
que The Soulbreaker Company es la
mejor banda nacional de estos momentos. Las ganas de volver a verlos en directo
siguen aumentando después de cada concierto.
Setlist: Many so Strange / Oh! Warsaw / 1789 / Colours of the Fire / Dust from the Stars / Kiss in your Face / How will we get by? / Rain or Shine / You! / Words (Neil Young cover) / Blood that you Wish / It's Dirt / The Wheel is Turning
Aunque aún quedaba otra actuación más para cerrar el festival, las fuerzas flaqueaban y optamos por dar por concluida nuestra presencia en esta segunda edición del Siberia Rock. Una edición que de nuevo ha vuelto a ser un éxito y que esperemos tenga cuerda para rato, se agradece enormemente el esfuerzo de los organizadores por brindarnos la oportunidad de disfrutar de manera gratuita de bandas de gran nivel. Rock on!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario